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¿Qué es la resiliencia financiera y cómo desarrollarla? Consejos clave

En un entorno económico cada vez más incierto, marcado por la inflación, los cambios tecnológicos y un mercado laboral en constante transformación, el concepto de resiliencia financiera ha cobrado especial relevancia.

Para Claudia Castro, partner de Nu México y especialista en educación financiera, la resiliencia no solo tiene que ver con soportar crisis económicas, sino con “la capacidad de reorganizarse, levantarse y seguir adelante sin que las deudas o la incertidumbre nos paralicen”.

Vivimos rodeados de imágenes de éxito inmediato, pero la vida real, en finanzas y otros ámbitos, está llena de altibajos: pérdida de empleo, disminución de ingresos o gastos inesperados.

¿Cómo estar preparados para estos momentos sin caer en el estrés financiero? La clave, asegura Castro, está en gestionar los recursos de forma inteligente durante las “vacas gordas” para no sufrir durante las “vacas flacas”.

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¿Qué tan preparados están los mexicanos ante una emergencia económica?
Según Castro, la educación financiera sigue siendo un reto pendiente en México. Aunque se ha avanzado, aún gran parte de la población no lleva presupuestos ni planea con base en metas.

“Muchos vivimos al día, gastamos sin planear y llegamos sin dinero al final de la quincena”, explica.

Sin embargo, hay señales alentadoras. El 63% de los mexicanos entre 18 y 70 años ya tiene una cuenta de ahorro formal, lo cual supone una cifra histórica, y cada vez más personas están aprovechando herramientas digitales, como la cajita Nu, que permite separar dinero del gasto diario y obtener rendimientos sin complicaciones.

"La educación financiera no es un privilegio, es un derecho. Y con herramientas digitales al alcance, hoy es más posible que nunca", afirma Castro.

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¿Qué hábitos puedo llevar a cabo para que mi dinero me rinda más?
La especialista señala que pequeñas acciones cotidianas pueden transformar la relación con el dinero:

  1. Haz un presupuesto claro: Anotar gastos e ingresos es la base de toda salud financiera. Puedes usar apps, libretas o Excel.
  2. Ahorra primero, gasta después: Aparta entre 10% y 20% de cada ingreso antes de distribuir el resto. Aunque sean 50 pesos semanales, es el hábito lo que importa.
  3. Organiza tus compras y comidas: Comprar por impulso o pedir comida a domicilio eleva el gasto en hasta un 30%. ¡Planear te ahorra tiempo y dinero!
  4. Cuestiona tus compras: Antes de dejarte llevar por las ofertas, pregúntate si esa compra te aleja o acerca a tus metas financieras.

“No se trata de dejar de vivir o de ser codo, sino de tomar decisiones conscientes que no comprometan nuestra tranquilidad económica”, asegura.

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¿Qué está haciendo Nu para cambiar la forma en que manejamos nuestro dinero?
Durante la más reciente Semana Nacional de Educación Financiera, Nu presentó la activación “Decide tu $uerte”, una experiencia inmersiva creada para demostrar cómo decisiones simples del día a día pueden cambiar tu futuro financiero.

A través de escenarios de la vida real, los asistentes descubrieron su perfil financiero y entendieron cómo sus elecciones hacen crecer o debilitan su resiliencia.

Además, la empresa refuerza el acceso a la educación financiera con formatos accesibles y gratuitos como Academia Nu, desarrollada junto a CONDUSEF y expertos internacionales, donde cualquier persona puede aprender lo básico sobre ahorro, crédito y finanzas personales a su ritmo.

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Estos son algunos datos que respaldan la urgencia:

  • 50.8% de los mexicanos se encuentra en un nivel bajo o medio-bajo de bienestar financiero (ENSAFI 2023).
  • 36.9% de los adultos en México reporta un alto nivel de estrés financiero.

El uso de herramientas financieras digitales se ha disparado, pero aún falta desarrollar conciencia y hábitos saludables para lograr estabilidad duradera.

Claudia Castro lo resume así: “No necesitamos tener millones para empezar a construir estabilidad. Necesitamos información, voluntad y herramientas accesibles. Hoy, eso ya es posible”.

La resiliencia financiera no depende de la suerte, sino de decisiones que se toman todos los días.