“Nuevo Código Penal era una necesidad impostergable para la República Dominicana”

San Francisco de Macorís.– El senador Franklin Romero afirmó que la aprobación del nuevo Código Penal representa un avance histórico para el país, al actualizar una legislación que, en su base, data de casi dos siglos. En entrevista para el programa El Toque del Mediodía, conducido por Roberto Neris.
“Este es un código que después de más de 20 años de estudios y debates, en distintos periodos congresuales, finalmente se ha logrado consensuar. Contempla más de 75 nuevas tipificaciones penales y sanciona delitos que antes no estaban incluidos, como el uso de sustancias como la burundanga, el ácido del diablo, el cibercrimen, la discriminación, el terrorismo y la invasión de terrenos”, explicó Romero.
El legislador resaltó que la nueva normativa también incorpora medidas más estrictas contra la corrupción, incluyendo la acumulación de penas de hasta 60 años y la prescripción de hasta 20 años para perseguir delitos cometidos por funcionarios públicos, así como su inhabilitación para ejercer cargos. Además, se fortalece el decomiso de bienes ilícitos, alineando el código con la Ley de Extinción de Dominio.
Uno de los puntos más debatidos el tema de las tres causales para el aborto quedó fuera del texto, decisión que, según Romero, permitió destrabar la aprobación del código. “El derecho a la vida desde la concepción está en la Constitución. Las causales se deben discutir en una ley especial de salud”, precisó, aunque reconoció que el artículo 42 contempla excepciones cuando la vida de la madre esté en riesgo.
Romero adelantó que el nuevo Código Penal entrará en vigencia en 2026, tiempo durante el cual jueces, fiscales, abogados y la ciudadanía deberán familiarizarse con sus disposiciones. “Lo más importante es que la gente conozca la ley y entienda las consecuencias de sus actos”, sostuvo.
El senador también destacó la creación del Ministerio de Justicia, que separa las funciones de persecución penal de la administración de bienes incautados, buscando evitar abusos y el deterioro de propiedades bajo custodia del Estado.
“Este código es una herramienta moderna, no sólo para castigar, sino para prevenir y garantizar derechos fundamentales. Está pensado para estar vigente no solo hoy, sino 20 años hacia el futuro”, concluyó Romero.