LOS MANSOS CON LOS SIMARRONES.

Según la policía nacional los cinco muertos en La Barranquita estaban ligados al narcotráfico.
Sin embargo, José Vladimil Valerio Estévez, de acuerdo a sus familiares estaba abriendo su barbería en una plaza del sector La Barranquita de la provincia Santiago.
Señalaron que el joven se dedicaba a la barbería, y que los miembros de la Dirección Central de Investigación (Dicrim), llegaron al lugar y de inmediato dispararon contra los presentes, ante esto Valerio Estévez, le pidió que no lo mataran y salió corriendo.
Denuncian que luego de disparar, los miembros del cuerpo del orden, “saquearon la peluquería, se llevaron el dinero, las maquinas, los discos duros de las cámaras” y un vehículo parqueado en frente de la peluquería “sin orden de un fiscal”.
Señalaron que al vehículo en que se transportaba también le pusieron un arma y los que estaban presentes también pudieron percatarse de esa acción policial.
Explicaron que los miembros de la policía también le quitaron el teléfono a una señora que estaba grabando.
Según el vocero de la Policía Nacional, Diego Pesqueira, vinculó a las cinco personas muertas al narcotráfico, robo y otros delitos.
Lo ideal es que se abra una investigación sobre ese caso de La Barranquista, porque sucede que en muchos casos de los denominados "intercambios de disparos", se van los mandos con los simarrones.