El negocio de las guerras
El Jefe de la ONU insiste en que Oriente Medio y el mundo no pueden "permitirse más guerras".
Sin embargo la ONU es un organismo manejado por los Estados Unidos que es el principal promotor de las guerras en el mundo.
Una industria que mueve billones de dólares, al igual que las drogas y el tráfico de seres humanos.
Por eso cuando no hay guerras el negocio se le va a pique.
Todas las guerras se originan por la voracidad de una potencia para acaparar recursos o por la competición entre dos comunidades por el acceso a los mismos bienes.
Es difícil encontrar enfrentamientos en los que no se pretenda una ganancia material por parte de los contendientes.
Lo vemos con los desencuentros entre agricultores y ganaderos en el neolítico hasta las pugnas por las materias primas y la energía necesarias para mantener la industria moderna”.
De esta manera, mediante la acción militar, se ocupan los enclaves geoestratégicos importantes (fuentes de abastecimiento y los recursos naturales, especialmente los energéticos, como los hidrocarburos), mercados para sus productos acabados y las vías de transporte.
Al mismo tiempo que poseen estos enclaves, desproveen al adversario de los mismos, consolidando así su hegemonía.
La historia está llena de episodios que buscan mantener la hegemonía de los imperios, para los que todas las guerras significan un gran negocio.