Cuatro tips para reconocer cuando un gasto es innecesario
Si acostumbras comprar de forma impulsiva o eres más bien de los que analiza si vale la pena o no lo que vas a pagar por un producto, el resultado lo conoces bien: andar preocupado porque siempre te falta dinero o contar con un poco de tranquilidad al saber que tus gastos están controlados.
Es muy importante que distingas aquellas compras que terminarán afectando tu bolsillo. Aquí te damos Cuatro tips para reconocer cuando un gasto es innecesario.
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Hay coleccionistas que ofrecen pagar desde 2 mil y hasta 4 mil pesos por una de ellas.
1. ¿ES SÓLO MODA O LO NECESITAS EN REALIDAD?
No se trata de que elimines algunos gustos que puedas darte. Pero es vital para tus finanzas personales que separes aquello que solamente te gustará por un rato de aquello que disfrutarás o darás uso por un tiempo prolongado.
Desde la ropa que compras y termina empolvada en un clóset porque solamente lo usaste dos veces, porque el color 'ya no se usaba'; o aquella inscripción del gimnasio al que nunca fuiste pero pagaste porque todos hablaban del lugar.
2. ¿QUÉ USO PUEDES DARLE A LO QUE QUIERES COMPRAR?
Supongamos que te gusta cocinar. Vas a una tienda donde encuentras ollas para preparar los alimentos al vapor o tablas para picar verdura. El pequeño inconveniente es que ambos son para manejar grandes porciones de comida, por ejemplo para un restaurante, y tú vives solo.
Sólo porque puedas comprarlo no necesariamente significa que puedes hacerlo. Es igual que si le regalaras un casco a una persona que no tiene motocicleta sino auto, no le serviría.
3. ¿PUEDES ENCONTRARLO MÁS BARATO EN OTRO LUGAR O EN ALGUNOS MESES MÁS?
Siempre será mejor comparar precios en distintos sitios. A veces, tomarte tu tiempo puede ahorrarte más que unos cuántos pesos. Además, hay productos que bajan su costo a medida que pasa el tiempo, también deberías considerarlo.
4. INFÓRMATE SOBRE LA CALIDAD DE LO QUE BUSCAS
Buscar comentarios de personas que hayan adquirido un producto que te interesa es una buena forma de prevenir hacer un gasto innecesario.
Por ejemplo, comprar software para una computadora. Imagina que quieres comprar un programa para editar fotos y pagas por él sin investigar, y después te das cuenta que el sistema operativo de tu laptop no es compatible o que tu aparato se vuelve más lento. Antes de dar el salto, entra a sitios adecuados para saber si la calidad o las características son convenientes para ti.