Los hipócritas hoy abrazan el discurso de la Revolución de Abril

Dicha acción necesitó de mucho coraje y gallardía para que un pueblo desarmado, lograra enfrentar el ejército más poderoso del mundo.

De abril nos quedó Caamaño, un hombre el cual todos los Dominicanos deberíamos sentirnos sumamente orgullosos, pues este al igual que Duarte y otros tantos, enarbolaron una lucha en todos los escenarios.

Fueron hombres justos, desprendido y sacrificado por los mejores interese de la patria.

Hoy Caamaño al igual que Duarte, Jesús y otros grandes revolucionarios fueron abrazados por los hipócritas.

Esos mismos que hoy les hacen reverencia son los mismos que los matan día a día, los que resaltan su entrega por los mejores intereses del país, son los mismos que mañana desfalcan el país, y violan el orden constitucional.

Los mismos que aceptan 500 pesos y un pica pollo para votar por un corrupto, los mismos que solo recuerdan a Caamaño solo en Abril, olvidando que este más que un valiente guerrillero era una filosofía de vida.

Caamaño debemos ser todos los días, al igual que Duarte y Jesús, pues ambos fueron ilustres que nos dejaron un gran legado, nos enseñaron que para servir al prójimo, no necesariamente tiene que ser de una curul, que debemos ser intensos sacrificados y pulcros, solo en fechas históricas sino en cada momento de nuestras vidas.

No basta con subir fotos a nuestras redes y destacar las figuras, debemos enarbolar estos magníficos ejemplos y adoptarlos como filosofía de vida.