Cómo evitar la tentación del gasto hormiga en tus compras

Debido a las crisis económicas que se han suscitado en nuestro país, muchas personas vivieron experiencias que probablemente les dejaron aprendizajes como: ser consumidores más responsables en cuanto a la cantidad de productos que consumen o analizar de manera más consciente que artículos o servicios piensan adquirir.

Sin embargo, en caso de que no te hayas decidido por aplicar estos buenos hábitos, de acuerdo con lo publicado con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), aquí te decimos cómo evitar la tentación del gasto hormiga en tus compras, lo cual podría tener como resultado un incremento en tus finanzas personales, ya que pudieras gastar menos y ahorrar más.

1.- Elabora un presupuesto
Si elaboras un presupuesto, es probable que tengas un panorama más claro sobre tus ingresos y egresos, es decir tendrás un control más preciso, lo cual te podría servir para que tomes las decisiones más acertadas al momento que desees consumir algún producto o servicio, por ejemplo, al revisar tu presupuesto de forma recurrente, quizá tus gastos sean mayores al dinero que percibes, por lo cual no te convendría seguir realizando erogaciones innecesarias que te podrían generar un déficit en tu economía, pero si por el contrario, analizas de forma detallada tus estado de cuenta, posiblemente tu capital se incrementará y tus ahorros también y además evitas consumir de forma irresponsable e innecesaria.

2.- Anota tus gastos
Independientemente del valor del gasto que hagas a la hora de algún consumo, ten en cuenta que lo ideal es que lo anotes, ya sea en tus libros de contabilidad personal o también existen diversas apps en las que podrías llevar dichos el control de dichos registros de forma más sencilla. Por más insignificante que sea tu compra, haz el registro correspondiente, para que evites que se te acumulen los famosos gastos hormiga.

3.- Planea cuánto vas a gastar cada día
Este tipo de acciones se refiere, a que podrías determinar qué cantidad de dinero vas a gastar durante el día, por ejemplo: guarda en tu bolsa o en tu cartera el monto exacto de lo que vas a ocupar, como transporte, comidas, gasolina entre otros. Con este hábito podrías evitar gastos innecesarios como antojos o consumos que en realidad no necesitar hacer.

4.- Promueve el ahorro
Después de haber realizado todos tus pagos y compras necesarias, intenta guardar el dinero que te sobra en la quincena o el mes, el cual podrías destinar a una cuenta de ahorro o acudir con un asesor financiero, con la finalidad de que te genere intereses.

5.- No consumas por impulso
No realices compras sin antes analizar si realmente ocupas el producto o el servicio y sin verificar de manera detallada tu presupuesto, es decir, ten cuidado con la tentación porque quizá sea un artículo que no ocupes.

6.- Compara antes de consumir
En caso de que ya te hayas decidido por realizar la compra, compara calidad, precios, opciones de pago, si lo harás en línea o acudirás directamente al establecimiento, entre otras, con la finalidad de que encuentres el artículo que realmente necesitas al menor costo.

7.- No utilices créditos innecesarios

Utiliza métodos de crédito si realmente es necesario.
Recuerda que una tarjeta de crédito, es solamente un instrumento financiero que se podría utilizar en ocasiones especiales y si lo usas de manera inadecuada, es probable que te genere altos intereses, afectando tu bolsillo.
En ocasiones hay establecimientos departamentales que ofrecen alternativas de crédito a meses sin intereses, ten cuidado de no caer en ese tipo de tentaciones, ya que al final son mensualidades que tienes que pagar cada mes.
Para evitar el pago de intereses, cumple con tus obligaciones de pago en tiempo y forma.

8.- Conversa con tus familiares
Trata de involucrar a tus familiares en los temas financieros, con el objetivo de que estén conscientes de tener una economía estable y sana. Platica con tus hijos y diles cómo utilizar de manera responsable el dinero, cómo evitar el despilfarro, fomentar el ahorro, comparar precios y todo lo necesario para que con el paso del tiempo se vayan convirtiendo en consumidores responsables.